Al final de estos comentarios habrá un mosaico de fotos de la casa y deelementos de permanente exposición.
Esquina casa San Jorge
Bella construcción colonial de finales del siglo XVII. Su primer propietario fue Agustín Londoño, quien la vendió en 1730 a José Sánchez de la Torre y éste remató la casa en 1748. Luego de varios propietarios más, Don Jorge Miguel Lozano de Peralta Caicedo compra la casa en 1784, la cual fue suya por 48 años, que posteriormente fue vendida a Pedro Lasso de la Vega. Después de sucesivas ventas, pasó por 79 años a Don Ruperto Restrepo Montoya y descendientes, fue donada entonces a las religiosas adoratrices y ya en 1972 la casa fue adquirida por el Banco Popular para convertirla en el Museo Arqueológico de muestra precolombina, además en algunos de sus salones se expone arte religioso y muebles coloniales de estilo criollo y español.
La casa es tal vez, la única que conserva la arquitectura colonial original. El ingreso a la casa es a través de un zaguán, pasa al corredor, en el cual se muestra un aporticado en columnas de piedra y arcos carpaneles que se proyectan en el segundo nivel. El patio central tiene su fuente de agua y alrededor de éste, los balcones en sus cuatro costados direccionan a distintos salones. Otros espacios conforman el salón – comedor, terrazas, mirador y patios interiores.
Destaca en su fachada la columna esquinera, sobre la cual sobresale un balcón corrido en madera, sus bellas rejas de seguridad en las ventanas, su iluminación en faroles adosados a los muros, muestran la tradición de las hermosas casas coloniales.
Otro detalle interesante son las cubiertas, cuyo sostén de madera era en par y nudillo; en lugar de quedar un techo a dos aguas o de perfil triangular, éste era de perfil trapezoidal, cuya base menor estaba en la parte superior de la armadura.
Este tipo de vivienda obedecía en su época, a un modo de vida interior familiar, donde sus habitantes solo necesitaban salir en día de mercado, incluso estas casas poco respondían a un diseño elaborado, aunque la manera de distribución espacial servía para vivienda, comercio, industria artesanal, un convento y todavía más, hasta para un claustro de estudio.
La casa ha sufrido varias restauraciones y en la de 1994 encontraron rastros de pintura mural muy fraccionada, con representaciones geométricas y algunos detalles de tipo religioso.
Muchas de las casas de la época colonial tenían tipología muy parecidas, era el mobiliario y la decoración y el buen gusto de sus moradores lo que las diferenciaba.
Vista desde tercer nivel a segundo parte posterior casa
Pintura en muro alrededor de vano ventana
Barandillas balcones y columnas madera
Cubierta par y nudillo
Columnas en piedra y arcos carpaneles en segundo nivel
Pintura mural hecha a mano de la época de la colonia
Patio central con su fuente en el centro
Sofá de la época
Salón de exposición religiosa y muebles de la época
Sala roja y cuadros religiosos
Mesa madera con vasija en cobre
Cerámica precolombina
Vista salón-corredor nivel 2
Pintura mural parte superior y zócalo fragmentada
Pintura mural en balcón patio central
Cuadro religioso virgen
Balcón en la casa parte posterior
Último tramo escalas para llegar a nivel dos
Celosía de madera . Pintura mural arriba de la celosía: La eucarístia
Pintura mural y sillas
Portón Principal
Vista de patio central y balcones fondo
Los desposorios de La Virgen de Baltasar de Figueroa
Santa Teresa de Jesús
Retablo de madera
Actual salón de conferencias
Buenos dias
ResponderEliminarMe llamo Javier Pardo de Castro y soy descendiente de Jorge Miguel Lozano de Peralta por la línea de María Josefa Lozano de Peralta (cuarta hija del Marqués) y dentro de lo que he podido averiguar, esta casa no era la casa de residencia del marqués, si no una más de sus propiedades. Parece ser que su palacio fué destruido en el terremoto que sacudió a Bogotá hace varios años.